Se aprueba la Ley de Tratados Internacionales ante la impotencia de los constitucionalistas10/5/2017 DAVID OBACH. BARCELONA La sesión de la Comisión de Acción Exterior de este 5 de octubre empezó tarde por cuestiones organizativas y se vio marcada en su primer tercio por la crisis del partido Unió per la Independencia con el Equipo de Prensa, originada por una publicación del diario elmedio.es. Cuando el ambiente se calmó, la Comisión continuó su debate de la Ley sobre la Adhesión a Tratados y Convenios Internacionales en el Marco de una República Catalana Independiente. Las enmiendas de los grupos parlamentarios se centraron en los artículos que hablan de la promoción de la seguridad internacional y el fomento del derecho de autodeterminación, de las Misiones Especiales y Delegaciones, de las Oficinas Consulares y de las Misiones Diplomáticas Permanentes y la Representación Permanente ante la Unión. Una vez acabó este plazo para presentar enmiendas al articulado, se abrió el plazo para presentar enmiendas técnicas, que corrigen errores ortográficos y de cohesión interna y se aprueban por asentimiento general. Sólo se presentó una enmienda técnica (por parte de los Socialdemócrates) y no dio lugar a debate. El siguiente capítulo fue las disposiciones. Civics per Catalunya presentó una enmienda de supresión de la disposición final primera, manifestándose en contra de las Elecciones Constituyentes que plantea, pero fue rechazada. Asimismo, CE presentó una enmienda de modificación a la Disposición Derogatoria y Civics les prestó su apoyo. Por último llegó la fase más importante: el debate del texto íntegro de la ley. Si tras el debate el texto no se aprobaba, la Ley no pasaría la fase de comisión y no llegaría al Pleno. Unió per la Independencia tuvo el primer turno de la discusión, al ser el grupo parlamentario que proponía la Ley. Su portavoz calificó el texto de “maravillosa ley” y la réplica llegó automáticamente desde Civics Catalans, cuyo diputado dijo que la proposición rompía “con el pueblo europeo y con la solidaridad entre regiones”. Le siguieron Assemblea dels Països Catalans, citando en su intervención a Kennedy y a Fidel Castro pese a su subrayada línea anticapitalista. Sin embargo el momento que quedaría en la memoria fue para el diputado de CE, que al acabar su discurso pronunció en alto “viva España, viva el Rey, viva el Orden y la Ley”, provocando así el bochorno del resto de parlamentarios. El texto fue aprobado con siete votos a favor, cuatro abstenciones y un voto en contra y el éxito de la nueva Ley fue celebrado en la comisión con el himno dels Segadors, con los diputados de Unión per la Independencia y Assamblea dels Païssos Catalans en pie. Se ponía así fin a dos días de intenso debate sobre una polémica Ley que marcará de ahora en adelante el futuro en el ámbito internacional de la nueva Cataluña independiente. Eso sí, antes de finalizar la sesión por completo, se ejecutó un castigo a los diputados de Unió per la Independencia por sus altercados con la prensa. La pena consistió, como no, en bailar. Diputadas de UPI bailan en el castigo por sus altercados con la prensa, minutos después de aprobarse la ley que proponían
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